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lunes, 30 de mayo de 2016

SAN FERNANDO EL SANTO

Fernando III el Santo es, sin duda, uno de los más relevantes reyes hispanos, no sólo de la Edad Media, sino de toda la historia española. Durante su largo reinado y como consecuencia de su política, se produjeron una serie de importantísimos acontecimientos que marcarían el devenir de España durante siglos.

Fernando III reinó en Castilla tras la muerte de su tío Enrique I y la abdicación de su madre Berenguela, hija de Alfonso VIII de Castilla, desde 1217 hasta su muerte en 1252. También se ciñó la corona de León en 1230 al morir su padre Alfonso IX.

Desde mediados de la tercera década del siglo XIII y aprovechando la progresiva desintegración del estado almohade (que conduciría, incluso, a la formación de las denominadas Terceras Taifas) acometió campañas de conquista contra las ciudades más importantes del Valle del Guadalquivir de A-Andalus.

Así, combinando la diplomacia y la guerra, logra entrar victorioso en Baeza (1227), Córdoba (1236), Jaén (1246), Sevilla (1248) y así sucesivamente con otras ciudades del Valle Andaluz.

Si la conquista de Córdoba tuvo el valor simbólico de dominar la ciudad desde la que emires y califas, siglos atrás, enviaban ejércitos para asolar los territorios cristianos, la de Sevilla suponía tomar el centro neurálgico de la Andalucía almohade.

Hay que hacer notar que este empuje conquistador coincide con el de otro rey vecino, Jaime de Aragón, que hace lo propio tomando ciudades tan emblemáticas como Valencia (1238).

Fernando III muere en 1252 mientras organizaba una intervención en el norte de África que impidiese la reactivación de la amenaza musulmana que siempre procedía de estos territorios.

En 1671 fue canonizado por el papa Clemente X, de ahí de que se le conozca como Fernando III el Santo o San Fernando.

Patrón de la ciudad de Teruel.

 
Mudéjar

En la segunda mitad del siglo XII y como consecuencia del avance reconquistador de los reinos cristianos va a aparecer de manera titubeante un arte mestizo y exclusivo de lo hispano que es el mudéjar. La habilidad y baratura del trabajo de los alarifes va a permitir que el románico pierda algunas de sus propiedades y se combine con estéticas y técnicas musulmanas para hacer nacer el mudéjar.

Este fenómenos aparece en Sahagún (León) y Daroca (Aragón) y más tarde se extiende por amplias zonas de Castilla y León, Toledo y Teruel, siendo el siglo XIII el de su auténtica expansión.

En Castilla y León, este mudéjar primitivo está muy influido por la arquitectura románica como se puede comprobar en los modelos de Tierra de Pinares (Valladolid, Ávila y Segovia) y el Modelo Toresano (Zamora y Salamanca). Mientras, en Toledo y Teruel, la impronta musulmana es mayor con relación a lo cristiano.


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