LOS ALUMNOS DEL COLEGIO DIOCESANO “LAS VIÑAS”

LOS ALUMNOS DE 6º A DEL COLEGIO DIOCESANO “LAS VIÑAS” ENTREVISTAN A DON ANTONIO GÓMEZ

Con motivo del aniversario de Diario de Teruel, los alumnos de sexto del Colegio Diocesano Las Viñas han realizado un suplemento “Diario de zagalicos”, en el que cuentan la actualidad  turolense, de una forma diferente. Don Antonio Gómez ha sido la persona entrevistada por los alumnos del grupo A. En ella podemos conocer a nuestro obispo, a través de la mirada de los niños. ¡Esperamos que os guste! Entrevista publicada en Diario de Teruel, miércoles 15 marzo 2017: ¿Cómo se enteró de que iba a ser obispo de Teruel? -Me lo dijo el nuncio, que es como el embajador del Papa. Quedé con él y sacó una carta y me dio la noticia. Estuve dieciocho días sin decírselo a nadie y entrando en internet porque yo de Teruel conocía Albarracín y la ciudad muy poco. Hace veinticinco años estuve aquí visitando los amantes, compré un jamón y me hice una foto en la plaza del torico, con un pantalón vaquero y una camisa blanca y el jamón al hombro. -¿Cuánto cree que va a estar en la Diócesis de Teruel y Albarracín? -Le dije al señor nuncio. Vista mi diócesis de Palencia que en 10 años hemos tenido tres obispos le acepto pero no me cambie de sitio porque yo me encariño con la gente. -¿Le ha sido difícil vivir lejos de su familia? -Yo siempre he vivido lejos de mi familia. Mi madre, algunos hermanos y sobrinos viven en Oviedo. Otro hermano vive en Coruña y una sobrina en Bruselas. -¿Qué le dijo el Papa cuando le visitó? -Cuando me recibió me preguntó con acento argentino. -¿Así que vos sos el obispo novato? -Si soy el obispo de Teruel y Albarracín. -Pues diviértase siendo obispo. -¿Y cuando haya problemas? - Pues los tome con soda. -Háblenos de los objetos que lleva como obispo. -El pectoral es una cruz que se lleva junto al pecho porque en mi corazón tiene que estar Cristo. La cruz de plata que está en él me la regaló mi tía abuela hace treinta y cinco años cuando me hice cura. La madera que lleva alrededor es de olivo del Huerto de Getsemaní. En mi parroquia había una familia que su abuelo fue embajador en Palestina cuando no existía el estado de Israel y la capital era Jerusalén. El patriarca de esta ciudad le regaló a este señor una cruz de madera que certificaba que era del Huerto de los Olivos y que tenía más de dos mil años. Me la regalaron y cuando me hice obispo puse un trozo de esta madera aquí. La misma está también en mi anillo. El anillo significa que me he casado con esta diócesis, es un símbolo matrimonial. -¿Qué sería si no hubiese sido sacerdote? -Arquitecto, lo tengo claro, porque es mi pasión. Todavía sigo comprando libros de arquitectura. El otro día encargué uno a París sobre cómo construir con barro. Hace tres años compré una colección sobre construir con hormigón. -¿Le gusta leer?. ¿Qué es lo último que ha leído? -“Doce gatos y una gallina” y es sobre el maltrato a la mujer. Tengo una biblioteca de unos tres mil libros. Aquí he traído unos mil. El resto los tengo en mi casa del pueblo que heredé de mis tíos, que me criaron. No me gustan los libros digitales, me gusta coger el libro, verlo. Me encantan los libros de historia, arquitectura, policiacos, me gustan las novelas que me hacen pensar, las novelas rusas. -¿Le gustan los animales, tienealguna mascota? -Si vais algún día a casa, al obispado conoceréis a mi gato Chispas. Teníamos a Chispas y a Trizas un perrico. Heredé a Chispas de mi tía, hace seis años. Ellos dormían juntos en la misma cesta, comían de la misma comida… se criaron juntos. Trizas está con mi hermano en Galicia y el gato se quedó conmigo.